Baños Pleamar

Cuando tu corazón se hace viñetas

Hay un dicho que dice: “Cualquier tiempo pasado fue mejor”. Si me adentro en los recuerdos de mi niñez, es imposible no sentirme identificado con esta frase. Recuerdo que cada día era una nueva aventura para mí. Me levantaba con energía sin poder esperar a que comenzara la jornada, en aquellos tiempos en que todo era maravilloso. Mis amigos se contaban a cientos, mis padres eran invulnerables y mi hermano un ejemplo de lo que yo quería ser. Mi única responsabilidad real era disfrutar de mi vida y de toda esa felicidad que poseía. El tiempo que esa burbuja de inocencia e inmadurez pudiera durarme. Creedme que lo conseguí con creces. Me aferre a ello con dientes y uñas, incluso a pesar de que a mi alrededor realmente no fueran bien las cosas. No me malinterpretéis, obviamente mi vida no estaba exenta de problemas y complicaciones. Me daba cuenta de cuando mis padres habían discutido. Me daba cuenta cuando en mi casa no había dinero ni para comprar el pan y mis padres tenían que pedirnos el dinero de la paga ahorrada. Me daba cuenta cuando mi padre llegaba de estar trabajando de policía con la ropa llena de sangre y ellos hacían lo posible para que no lo viera. Me daba cuenta cuando mi hermano se alejaba de nosotros en su adolescencia como si ya no le importáramos. Me daba cuenta de cuando un amigo se mudaba de nuestro barrio buscando una vida mejor mientras yo no podía imaginarme vida mejor que la que tenía allí… En resumen, era consciente de todo. Sin embargo, la burbuja de la que os hablaba era tan confortable que lo obviaba, con ese “egoísmo” que poseía de niño, sabiendo que allí estará mi hermano y mis padres para recibir los golpes y volver a encauzar todo, a veces como me gustaba, y otras veces no tanto, pero el peso nunca residía en mí.

Mi burbuja explotó hace ya muchos años. La caída fue fuerte y he pasado mucho tiempo sumido en esa nostalgia pesada y dolorosa de pensar que mi vida nunca volvería a ser tan feliz como fue en aquella época. Y no es hasta ahora, con la madurez por bandera, cuando he podido realmente analizar la realidad. Una vez oí a un psicólogo hablar de porque cualquier tiempo pasado pensamos que fue mejor, y es sencillamente que de pequeños nuestro subconsciente se autoprotege, borrando las cosas malas de nuestra mente que nos atormentan y duelen, que nos son difíciles de entender y aceptar, dejando paso sólo a los buenos momentos. Ahora sé que mis padres no eran invulnerables, que hicieron lo que pudieron con las circunstancias que tuvieron y que eso fue muchísimo. Ahora puedo valorar realmente todo lo que han hecho por mí. También sé que mi camino y el de mi hermano iban por distintos sitios, y yo no tenía que seguir el suyo, sino trazar el mío e irnos encontrando de vez en cuando por él. Que al igual que mis amigos que se fueron, yo he tenido que volar lejos en busca de otros lugares, no se si mejores o peores, pero siempre dónde debo estar y sin olvidar de dónde vengo, junto con todo lo que aprendí allí. En definitiva, que todos somos humanos, con nuestros defectos y virtudes, nuestras caídas, nuestros momentos de volar y con un pasado que amar, sin quedarnos anclados en él.

No os suelto todo este rollo por nada, sino porque esto es Baños Pleamar, un viaje catártico de su autor Isaac Sánchez, el cual nos abre de par en par su corazón y los rincones de su alma en esta obra en la que lleva trabajando dos años. En ella, el guionista de pequeño, nos va narrando a través de sus ojos como vivió los días que rodearon una de las etapas de su familia más importantes, llevando hacia adelante el local de Baños Pleamar en la playa de Badalona. De esta forma, el autor habla del estilo de vida curiosa que llevaban, ya que se alojaban en el mismo edificio, como también narra el día a día de una familia obrera en los años 80. Admiro cuando un autor es capaz de mostrar su interior de esta forma, sin miedo a que pueda pensar la gente y sin mostrar sólo lo que tal vez le convendría. No toma al lector por tonto, sino que es sincero contando tanto las cosas buenas como las cosas malas que vivió en su niñez, consiguiendo que me sienta identificado constantemente con la obra porque a menudo siento que es la realidad que yo mismo viví con mi familia. Las últimas páginas del cómic me dejaron sencillamente sin aliento y os asegure que las lagrimas corrieron por mi cara.

Es la cuarta obra que leo de este autor, y especialmente Taxus y El Don me encantaron, pero esta creo sinceramente que es su mejor obra. Isaac Sánchez se sale de su zona de confort que era la fantasía y la ficción, para adentrarse de lleno en el costumbrismo, pero sin perder nada de frescura y sorprendiendo a este lector. Aun así, son muchos los que aún le prejuzgan por ser también streamer y youtuber, sin haber dado siquiera una oportunidad a sus trabajos. Supongo que para el guionista ha sido esto una bendición y una maldición, en parte porque mucha gente se habrá sentido atraído hacia sus obras por conocerle como Loulogio, y maldición porque el mundo del cómic está lleno de puritanos que juzgan a diestro y siniestro como si el noveno arte fuera de su propiedad y el hecho de que se vuelva algo conocido y cercano a más gente supusiera un robo de algo que nunca les perteneció. Os puedo asegurar que cada una de estas obras que nos ha traído el artista son un trabajo buenísimo con guiones muy trabajados y un dibujo espectacular que mejora a cada obra que pasa. Así que no se dejen engañar por juicios absurdos ni por experiencias con otros youtubers que han traído productos nada trabajados o realizados por otros, este no es el caso.

Por último, deciros que esta historia os dará un refrescante baño al corazón, será como una buena paella rodeado de los que más quieres, y sentiréis que podréis hablar hasta con vuestros propios recuerdos. Nuestro presente y nuestro futuro son fruto de lo que ya hemos vivido, y por eso debemos analizarlo bien para aprender de ello y así cualquier tiempo que esté por venir sea mejor. Gracias a esta obra por emocionarme tanto.

Ficha técnica

Título originalBaños Pleamar
AutoresIsaac Sánchez
EditorialDolmen Editorial
Fecha de publicaciónMayo 2022

Un comentario en “Baños Pleamar

  1. Genial. He seguido a Lou durante más de 10 años y su trabajo siempre me ha gustado mucho. Aún no he tenido la oportunidad de leer alguna de sus comics publicados desde que decidió irse de lleno por este nuevo y maravilloso camino como escritor profesional, pero esta reseña me ha llamado mucho la atención. Es muy posible que me traiga un ejemplar para Argentina.

    Gracias.

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