Namor en las profundidades

¿Seguro que quieres saber la verdad?

Bienvenido al submarino Invencible, comandado en esta ocasión por el comandante Peter Milligan y el segundo abordo, Esad Ribic, quienes nos sumergen en lo más profundo de las aguas en busca de aquello que el hombre siempre quiso descubrir, la realidad detrás de lo que no es capaz de explicar. No tenga miedo. Pase y pónganse cómodo. Será una travesía larga y nada sencilla. Cuando las negras profundidades sean todo lo que le rodea, perderá la noción del tiempo, la baja presión hará que la cabeza no le responda como debería, y la sensación de claustrofobia será tal que sentirá que se ahoga dejándole sin respiración… Y en ese preciso momento, cuando no sepa si lo que ve es real o producto de su delirio, mirará a la oscuridad del mar, y sentirá que algo le devuelve la mirada… ¿O tal vez, alguien?

Con esta introducción, pretendo ambientaros en lo que exactamente te muestra esta obra tan sorprendente, en la que el guionista juega de forma magistral con la dualidad entre las creencias en mitos y la desacreditación de estos a través de los hechos científicos. ¿Hasta qué punto podemos asegurar que algo no existe si no tenemos pruebas? Y lo que es más importante, ¿de verdad queremos saber toda la verdad? Para ello, nos lleva al universo Marvel de los años 50, antes de que los seres sobrenaturales, ya sean superhéroes, dioses, mutantes… camparan a sus anchas por la tierra. Nos presenta al Doctor Stein, un científico y aventurero dedicado en alma y cuerpo a la desacreditación de todas aquellas leyendas y mitos que el hombre ha creado a lo largo de los siglos. Stein es contratado por la marina para buscar al comandante Marlowe, quien se sumergió en una expedición en busca de la ciudad pérdida de Atlantis, en la que murió toda su tripulación y en cuya última comunicación decía que había encontrado ese tesoro sumergido. Esto despierta en Stein un nuevo reto, poder colgarse una medalla más como el mejor “Desacreditador de mitos”, demostrando que esta población acuática no existe. Para ello, ponen a su disposición un submarino y una tripulación experta en descender a bajos niveles marítimos. Pero estos marineros no son tan incrédulos como el propio doctor y advierten a éste de que allí abajo ocurren cosas inexplicables.

Es durante este viaje cuando entra en juego la maestría de Esad Ribic, el cual nos da una lección con sus lápices transmitiéndonos el terror, la duda y el misterio en escenas que muestran poquísimo, consiguiendo contagiar así la misma sensación de vulnerabilidad y aislamiento que sufren los personajes de la historia. Es increíble ver la expresividad en las facciones de cada uno de los tripulantes del submarino, quienes pasan por todo tipo de situaciones. Este dibujante me volvió loco cuando leí su etapa en Thor, pero aquí creo que está incluso a un nivel superior, por el tipo de escenario que presenta. No estamos hablando de Asgard y un montón de dioses pegándose de leches, hablamos únicamente de un submarino rodeado de tinieblas, el cual el artista lo convierte en una maravilla visual a cada momento.

Seguramente os estéis preguntando: Oye, que el cómic es de Marvel, ¿dónde están los superhéroes? Pues, como bien esta historia quiere transmitir, no todo es lo que parece. No habla de heroicidades, habla del terror y la inseguridad del desconocimiento. Al ser humano le aterra desde siempre no controlar todo lo que hay a su alrededor, y se aferra a la ciencia en busca de respuesta. Sin embargo, a la misma vez, nunca hemos dejado de sentir que hay cosas que se escapan a nuestro entendimiento, y para ello nos agarramos a la fe, ya sea religiosa o de mitos y leyendas. Esta obra me hizo pensar hasta qué punto estamos dispuestos a llegar para descubrir todo y, si realmente la respuesta nos dará la satisfacción que buscamos. ¿En verdad necesitamos saberlo todo y llevar la razón científica para nuestra mejora personal, o tal vez la verdad nos deje al final más vacío de lo que estábamos?

Para acabar, quiero hablaros de un momento que viví hace unos años, estando de vacaciones en la playa. Una noche baje a bañarme y me metí en el agua totalmente solo, en absoluto silencio y oscuridad. El momento fue aterrador, pero a la misma vez precioso. La sensación de absoluta calma que me envolvía contrastaba con el miedo a no saber que había a mi alrededor. Este cómic me lo recordó este momento al leerlo, y si alguno habéis experimentado algo parecido, os podréis hacer una idea similar de lo que sentiréis con sus páginas. Por cierto, se me olvidaba… en cuanto a Namor… Tendréis que descubrirlo vosotros mismos…

Ficha técnica

Título originalSub-Mariner: The Depths
AutoresPeter Milligan y Esad Ribic
EditorialPanini Comics
Fecha de publicaciónNoviembre 2009

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