Uncle Arthur still read comics, Uncle Arthur follows Batman
Desde hace años, he tenido mis más y mis menos con este festival comiquero que como todo en esta vida, ha tenido sus altos y sus bajos. Sin embargo, la promesa de pasar un día con algunos de mis compañeros del podcast en semejante entorno, era una propuesta demasiado tentadora como para no apartar mis diferencias a un lado. Lamentablemente, todo no puede salir a pedir de boca en esta vida y los compromisos e imprevistos de esta, me dejaron completamente sólo en el campo de batalla. Por lo que haciendo de tripas corazón, y no queriendo malgastar la entrada que ya había comprado en la preventa, decidí visitar el salón esperando pasar poco más de la mañana y acabar ante mi sorpresa, pasando el día entero hasta la hora del cierre. Y es que, siendo franco, hay muchas cosas en esta 40ª edición del salón que fueron dignas de aplaudir y otras cosas que siguen siendo pequeñas espinitas que se me clavaron durante la jornada.
Empezando por lo bueno, diré que organizativamente el evento ha sido genial, ya que considero que la distribución del espacio ha sido perfectamente equilibrada dentro del pabellón principal, haciendo que, en ningún momento, llegaras a sentir el peso de la multitud, ni tampoco el desconcierto de permanecer horas en un recinto cerrado. Lo que ya no me ha gustado tanto, ha sido algo que me llamó poderosamente la atención, que fue ver pocos stands de figuras y merchandansing, pensando “lo típico, esto no es un salón del manga”. Pero cuando me disponía a ir al pabellón secundario para disfrutar de las exposiciones, me llevé la enorme sorpresa de encontrarme toda esta parte allí, creando un espacio bastante claustrofóbico, que hacía sentirse como un salón del manga comprimido entre esas 4 paredes y convirtiéndolo en ese bulto que barres debajo de la alfombra (cosa que a mi parecer se hubiera podido evitar abriendo el ultimo pabellón de la feria).

Afortunadamente, el evento sigue siendo una clara apuesta por los autores nacionales, quienes brillaron de manera fantástica ya que, ya siendo abanicados por grandes editoriales, como aquellos que se auto publican, no podemos negar que, como siempre, son los verdaderos héroes de estos eventos y todo un enorme placer poder conseguir una firma de estos, un saludo o lo que más valoro en mi caso, “decirles que su trabajo sigue siendo excelente y desearles que lo sigan petando”. Pero hablando de reencuentros, algo que ha vuelto al reciento ha sido nuevamente Nintendo, o más bien su monotemática publicidad. ¿Por qué para que traer una gran variedad de juegos de su catálogo si puedes hacer que las 12 consolas del evento reproduzcan el mismo juego? Una maniobra tan típica de la gran N, que no fue ninguna sorpresa.
Otras cosas a destacar, podrían ser las exposiciones dedicadas tanto a la evolución del comic en España como al propio salón, lamentando que una de estas, reservada a los grandes autores salidos de la escuela Joso, quedara relegada a una esquina poco transitada del pabellón principal, justo al lado de la zona infantil que, como siempre, sigue siendo uno de los mejores sitios para fascinar a los niños con la cultura comiqueara. Pero, ¿qué sería de un gran evento sin sus respectivos anuncios? Y si bien es cierto que el festival no se caracterizó por darnos tantos anuncios como en el salón del manga, sí que podemos destacar cuatro grandes sorpresas que nos dejó el evento, como la licencia por distrito manga del esperadísimo manga Beck de Harold Sakuichi, el descubrimiento tras un año de rumores de que el manga Aoi Horus no Hitomi había caído finalmente en ECC, la expansión del universo Spawn (sabiendo perfectamente que invencible se va a frotar las manos con ello) y la recuperación en una edición definitiva de la gran Savage Dragon de Erik Larsen, increíblemente pedida y reivindicada en nuestro podcast (sí, tenemos un fetiche con el verde, pero no se lo digáis a Hulk).

En definitiva, creo que esta jornada era lo que necesitaba para reconciliarme con este evento y volver a apuntarlo, de la misma forma que hago con el salón del manga, como una fecha especial en el calendario. Sólo puedo esperar y desear que esta vez mis compis del podcast se acerquen, por que como siempre se suelo decir, estos eventos son mejores en compañía y es por eso que dedicaré estas últimas líneas a las chicas de Translation time que vinieron a mi rescate, así como a las geniales personas que conocí en el evento y con los que pude compartir mi pasión.
Ficha técnica
Evento | 40 aniversario cómic Barcelona |
Fecha | 6 Mayo 2022 -8 Mayo 2022 |
Lugar | Fira de Montjuïc |
Organizadora | Ficomic |
Joooo. Al final no nos vimos…. y puede que nos cruzáramos y todo