A Ada Lovelace seguro que le hubiera gustado.
Hay que ver lo que hemos avanzado como sociedad. Hablo en serio, o al menos todo lo serio de lo que soy capaz, pues esa afirmación acostumbra a ir acompañada de una serie de neandertales dispuestos a empañar todo buen avance hacia un modelo social equitativo, donde no se mire si a alguien le cuelga un cimbrel del entrepierna, en pos de un modelo continuista casposo, falocentrista y que huele a cerrado y enrarecido. Pero en fin, hay que ver lo que hemos avanzado como sociedad. ¡A ver qué padre le dice a su niña hoy en día que va a casarse con el maromo de turno por el bien de la familia, y ella, sumisa, acepta sin rechistar!
Los que me conocen un poco más allá del ámbito comiquil, saben que me dedico a picar teclas como si no hubiera un mañana, que los ordenadores son mi día a día… El caso es que el mundo de los ordenadores, un mundo históricamente dominado por la supremacía fálica, tiene uno de sus primeros y para mi más meritorios exponentes en Ada Lovelace, considerada por muchos como la primera persona en crear un programa que sería interpretado por una máquina. Para quien no lo sepa, la srta Lovelace era la hija de Lord Byron, uno de esos señores con bigote de la alta sociedad británica del s.XIX que podía pasarse el dia escribiendo poesía, y aprendiz de Charles Babbage, otro de esos señoros british con ganas de darle fuerte a las matemáticas y, fun fact del día, inventor de lo que en inglés se llama cowcatcher, y que en la lengua de Cervantes pierde el punch inicial y se llama “deflector de objetos”, pero viene siendo la pieza de metal que llevaban las locomotoras de la época delante, a ras de suelo, para apartar las vacas que decían dormirse en medio de las vías.

En fin, y qué tiene que tiene que ver la srta Lovelace con Piel de Hombre, os preguntaréis. Pues bien, no es que en ese momento la chiquilla Lovelace disfrutará de muchas ventajas por el simple hecho de ser mujer, más bien lo contrario, mucho fue que la dejaran estudiar e investigar, pero gran parte de sus logros fueron vistos como triunfos del sr Babbage, por eso de ser hombre de ciencia y ella una mujer. Lo bien que le habría ido a la chiquilla Lovelace esa piel de hombre de la que pudo disponer Bianca, la prota del tebeo que hoy nos ocupa que, no del todo conforme con las decisiones que se toman en su casa en materia de su futuro, decide enfundarse como si de unos leotardos se tratara, la piel morena de tremendo jambo, para adentrarse en el mundo de los hombres y así, poder conocer al verdadero yo de su futuro marido.
A lo que deriva tan extraña decisión y las consecuencias que desencadena, sólo lo descubriréis si corréis a vuestro dealer de confianza (podéis ir andando o bien en transporte público, correr no es un requisito) y le decís que vais de mi parte, que si bien no os hará descuento alguno, pero al menos sabrá que en este podcast, se lee mandanga de la buena. O no, simplemente podéis negarme y quedar vosotros como gente de bien que lee cosas bien.

Sea como fuere, os invito encarecidamente a dejaros llevar de la mano del difunto Hubert por la cara B de una ciudad cualquiera de la italia renacentista, que bien podría ser Florencia o Milán, donde nada parece ser lo que parece, un viaje a la liberación sexual y espiritual, al conocimiento de uno mismo y a la aceptación hacia los demás, a la vez que saca a relucir lo absurdo de la hipocresía masculina.
Para ir cerrando ya la reseña, me gustaría hacer mención al dibujo y color, que si bien de buenas a primeras a alguien se le podría antojar simple en el trazo y en variedad tonal, creo que funciona a la perfección agilizando la narrativa y sirviendo de base para una historia, que una vez leída, no consigo imaginar con otro dibujo y color. Para mí, un acierto total en todos los sentidos y dimensiones.
– Esta obra fue reseñada en el episodio LIP 03×08 –“Nieve, cristal, manzanas y lecturas ” Recomendaciones fresquitas Vol. 5
Ficha técnica
Título original | Peau d’Homme |
Autores | Hubert & Zanzim |
Editorial | Norma Editorial |
Fecha de publicación | Diciembre 2021 |